2. El autismo en el aula: las necesidades especiales del alumno con TEA

2. El autismo en el aula: las necesidades especiales del alumno con TEA

El TEA (Trastorno del Espectro Autista) es un trastorno del neurodesarrollo que empieza a manifestarse alrededor de los dos primeros años del niño y se extiende durante el resto de su ciclo vital. Las áreas más afectadas son las capacidades de interacción social y comunicativa y la regulación flexible de sus pensamientos y conductas.

Un alumno con TEA no buscará relacionarse con sus iguales; y, si lo hace, su manera de interactuar puede ser inapropiada. Ambas situaciones podrían conllevar al aislamiento y el acoso en el aula de dicho alumno.

2. El autismo en el aula: las necesidades especiales del alumno con TEA

Otras características del niño autista, que interfieren en la inclusión dentro del aula, es la presentación de patrones de pensamiento y movimientos repetitivos (balanceo, cerrar y abrir puertas…), una hiperreactividad ante ciertos estímulos, la dificultad para la comprensión del lenguaje simbólico o para empatizar.

No obstante, los síntomas del TEA son muy heterogéneos.  No todos los alumnos que sufren autismo manifiestan las mismas alteraciones cognitivo y conductuales, ni en el mismo grado. Por lo tanto, es fundamental que el equipo docente y especializado adapte el programa de intervención atendiendo las necesidades específicas y personales del alumno y potencie aquellos rasgos que beneficiarán su inclusión en la escuela.

Presto

Para optimizar el proceso de aprendizaje de un niño autista las habilidades requeridas en autonomía e integración social, el profesional educativo necesita, a su vez, aprender a evaluar al alumno, valorar su situación en el aula, respetar su ritmo y estilo de aprendizaje y diseñar y poner en práctica adaptaciones curriculares específicas y eficaces para cada uno de ellos.

Al igual que el resto de los alumnos con necesidades educativas especiales, unaidentificación temprana es esencial en los TEA para permitir llevar a cabointervenciones lo antes posible y ajustadas a dichas necesidades.

Aunque actualmente no contamos con unos marcadores biológicos que nos señalen lapresencia de TEA, contamos con una serie de indicadores conductuales que puedenfacilitar la identificación de este trastorno.

  1. Sordera aparente paradójica. Falta de respuesta a llamadas e indicaciones.
  2. No “comparte focos de atención” con la mirada.
  3. Tiende a no mirar a los ojos.
  4. No mira a los adultos vinculares para comprender situaciones que le interesan o extrañan.
  5. No mira lo que hacen las personas.
  6. No suele mirar a las personas.
  7. Presenta juego repetitivo o rituales de ordenar.
  8. Se resiste a cambios de ropa, alimentación, itinerarios o situaciones.
  9. Se altera mucho en situaciones inesperadas o que no anticipa.
  10. Las novedades le disgustan.
  11. Atiende obsesivamente una y otra vez, a las mismas películas de vídeo.
  12. Coge rabietas en situaciones de cambio.
  13. Carece de lenguaje o, si lo tiene, lo emplea de forma ecolálica o poco funcional.
  14. Resulta difícil “compartir acciones” con él o ella.
  15. No señala con el dedo índice para compartir experiencias.
  16. No señala con el dedo índice para pedir.
  17. Frecuentemente “pasa por las personas como si no estuvieran”.
  18. Parece que no comprende o que “comprende selectivamente” sólo lo que le interesa.
  19. Pide cosas, situaciones o acciones, llevando de la mano.
  20. No suele ser él quien inicia las interacciones con los adultos.
  21. Para comunicarse con él, hay que “saltar un muro”, es decir, hace falta ponerse frente a frente, y producirgestos claros y directivos.
  22. Tiende a ignorar completamente a los niños de su edad.
  23. No “juega con” otros niños.
  24. No realiza juego de ficción: no representa con objetos o sin ellos situaciones, acciones, episodios, etc.
  25. No da la impresión de “complicidad interna” con las personas que le rodean, aunque tenga afecto por ellas.

Tabla. Indicadores de autismo típicos de la etapa 18-36 meses (Rivière, 2000)

Como se ha comentado anteriormente, lanormativa española estatal y autonómicacontempla los principios de normalizacióne inclusión como principios rectores en laescolarización del alumnado con necesidadeseducativas especiales, como es el caso delalumnado con TEA.

Los criterios de escolarización en cada territorioreflejan una tendencia común que consisteen la apuesta decidida por escolarizar a losy las alumnas en el espectro del autismo quepresentan necesidades educativas especialesen el entorno educativo menos restrictivo ynormalizador posible. Por tanto, el alumnadocon TEA será escolarizado preferiblemente enaulas ordinarias en centros ordinarios, con losajustes necesarios y específicos en función desus necesidades.

Entre las actividades y estrategias que se pueden realizar a favor de la buena adaptación del alumno autista, caben destacar:

  • La estructuración del entorno para que sea predecible por parte del alumno y se sienta seguro emocionalmente. La creación de rutinas, así como el diseño de una agenda con pictogramas, fotos o dibujos ayudarán al niño autista a anticiparse y comprender la secuencia de las acciones que requiere una tarea; también, a la identificación de las emociones propias y de los iguales.
  • El uso de apoyos visuales para facilitar las enseñanzas (programa TEACCH) y la incorporación de programas de comunicación y competencia social como el Programa de Comunicación Total, donde se asocian signos a vocalizaciones.
  • Siguiendo la metodología anterior, son de vital importancia los apoyos visuales (historietas, cómics y vídeos) para mejorar la comprensión por parte del alumno de las situaciones sociales e impulsar la imitación de conductas adecuadas.
  • En las fichas de trabajo del alumno también se debe incluir la secuencia de tareas, paso a paso, con claridad y dibujos de apoyo.
  • Por último, se aconseja crear un “círculo de amigos” del entorno al alumno con TEA: un grupo de compañeros que interactúen y le guíen en los entornos más abiertos (el patio, el comedor escolar o durante los cambios de clase).

Cuando las necesidades del alumnado requieren deuna respuesta específica adaptada y previo informepsicopedagógico y dictamen de escolarización,se opta por proponer la escolarización delalumnado con TEA en centros de educaciónespecial. La decisión se basa en considerar que,por la especificidad y naturaleza de los recursos yapoyos personales, técnicos y materiales de estetipo de centros, pueden proporcionar la respuestaeducativa más adecuada para favorecer eldesarrollo de este alumnado.

A. Necesidades educativas especiales

Es necesario aclarar, que teniendo en cuenta los rasgos de este trastorno, las necesidadesde cada alumno serán individuales y dependerán de infinitas variables (edad, nivelintelectual, ambiente sociofamiliar…).

  • Necesidades de tipo cognitivo

 Necesidad de trabajar requisitos previos al aprendizaje como son la atención, lapercepción, la imitación, la memoria…

 Necesidad de generalizar lo aprendido a diferentes contextos.

 Necesidad de que se le presenten las instrucciones y estímulos discriminativos posteriormente a haber asegurado su atención.

 Necesidad de neutralizar los estímulos irrelevantes que le puedan distraer.

 Necesidad de organizar física y temporalmente el medio donde sedesenvuelve.

 Necesidad de controlar el ambiente mediante claves estimulares (carteles,

pictogramas, canciones…) que antecedan o se mantengan en una actividad.

  • Necesidades de tipo comunicativo-lingüístico

 Necesidad de fomentar situaciones que provoquen comunicación de cualquier tipo(oral, gestual…).

 Necesidad de conseguir requisitos previos para la adquisición del lenguaje (percepción de lo relevante, atención; imitación…).

 Necesidad de comprender el significado social del lenguaje y la funcionalidad deéste y ajustarse a normas básicas de intercambio comunicativo.

 Necesidad de adquirir un sistema de comunicación.

 Necesidad de rehabilitación de las alteraciones que puedan existir.

 Necesidad de armonizar los aspectos formales, semánticos y pragmáticos, de modoque se optimice el empleo adecuado y adaptado del lenguaje oral o del sistema decomunicación empleado.

 Necesidad de asegurar la generalización.

  • Necesidades de tipo conductual

 Necesidad de reducir la frecuencia e intensidad de conductas autolesivas, si es quelas hubiera, y ser capaz de participar en actividades rehabilitadoras.

 Necesidad de eliminar el temor en los sujetos que le rodean, que en ocasiones puedeactuar de reforzador de la conducta agresiva.

 Necesidad de eliminación de conductas repetitivas y rituales e instauración deconductas adaptadas a cada contexto y situación.

  • Necesidades de tipo social y emocional

 Necesidad de implicarle con otras personas para que realice sus actividadesfavoritas.

 Necesidad de estructurar las interacciones de manera que sean recíprocas y sociales.

 Necesidad de un ambiente estructurado y poco cambiante.

 Necesidad de aprender reglas elementales del comportamiento social (inicio yfinalización del contacto social, rutinas sociales, interacción con los demás…).

Para finalizar este apartado, se incluyen los veinte puntos clave que recogeRivière para reflejar las necesidades que pueden demandar las personas con TEA. Ángel Rivière recoge 20 puntos clave que nos permiten entender mejor y acercarnos alas personas con TEA.

2. El autismo en el aula: las necesidades especiales del alumno con TEA

1-Ayúdame a comprender. Organiza mi mundo y facilítame que anticipe lo que va a suceder. Dameorden. Estructura mi mundo y evítame el caos.

2- No te angusties conmigo, porque me angustio. Respeta mi ritmo. Siempre podrás relacionarteconmigo si comprendes mis necesidades y modo especial de entender la realidad. (..).

3- No me hables demasiado, ni demasiado deprisa. Las palabras son «aire» que no pesa para ti, peropueden ser una carga muy pesada para mí. Muchas veces no son la mejor manera de relacionarteconmigo.

4- (…) necesito compartir el placer y me gusta hacer las cosas bien, aunque no siempre lo consiga.Hazme saber, de algún modo, cuándo he hecho las cosas bien y ayúdame a hacerlas sin fallos. (…).

5-Necesito más orden y anticipación en las acciones. Tendremos que negociar mis rituales para poderconvivir.

6- Me resulta difícil comprender el sentido de muchas de las cosas que me piden que haga.Ayúdame a entenderlo. Trata de pedirme cosas que puedan tener un sentido concreto y descifrable paramí. No permitas que me aburra o permanezca inactivo.

7-No me invadas excesivamente. A veces, las personas sois demasiado imprevisibles, demasiadoruidosas, demasiado estimulantes. Respeta las distancias que necesito, pero sin dejarme solo.

8- (…) Cuando tengo una rabieta o me golpeo, si destruyo algo o me muevo en exceso, cuando me esdifícil atender o hacer lo que me pides, no estoy tratando de hacerte daño. (…)

9- (…) muchas de las conductas que llamáis «alteradas» son formas de enfrentar el mundo desde miespecial forma de ser y percibir. Haz un esfuerzo por comprenderme.

10- (…). Mi mundo no es complejo y cerrado, sino simple. Aunque te parezca extraño lo que te digo,mi mundo es tan abierto, tan sin tapujos ni mentiras, tan ingenuamente expuesto a los demás, queresulta difícil penetrar en él. No vivo en una “fortaleza vacía”, sino en una llanura tan abierta que puedeser inaccesible. (…).

11- No me pidas siempre las mismas cosas ni me exijas las mismas rutinas. No tienes que hacerte túautista para ayudarme. El autista soy yo, ¡no tú!.

12- No sólo soy autista. También soy un niño, un adolescente, o un adulto. Comparto muchas cosas delos niños, adolescentes o adultos a los que llamáis «normales». Me gusta jugar y divertirme, quiero amis padres y a las personas cercanas, me siento satisfecho cuando hago las cosas bien. Es más lo quecompartimos que lo que nos separa.

13- Merece la pena vivir conmigo. Puedo darte tantas satisfacciones como otras personas, aunque no sean las mismas. Puede llegar un momento en tu vida en que yo, que soy autista, sea tu mayor y mejorcompañía.

14- No me agredas químicamente. Si te han dicho que tengo que tomar una medicación, procura quesea revisada periódicamente por el especialista.

15- (…). A veces, mis reacciones y conductas pueden ser difíciles de comprender o afrontar, pero no espor culpa de nadie. La idea de «culpa» no produce más que sufrimiento en relación con mi problema.

16- No me pidas constantemente cosas por encima de lo que soy capaz de hacer. Pero pídeme lo quepuedo hacer. Dame ayuda para ser más autónomo, para comprender mejor, pero no me des ayuda demás.

17- No tienes que cambiar completamente tu vida por el hecho de vivir con una persona autista. A míno me sirve de nada que tú estés mal, que te encierres y te deprimas. Necesito estabilidad y bienestaremocional a mi alrededor para estar mejor. (…).

18- Ayúdame con naturalidad y sin convertirlo en una obsesión. Para poder ayudarme debes tenertus propios momentos de descanso o dedicación a aquello que te gusta. Acércate a mí, no te vayas, perono te sientas como si llevaras una pesada carga a tus espaldas. (…)

19-Acéptame como soy. No condiciones tu aceptación a que deje de ser autista. Sé optimista sinhacerte «novelas». Mi situación normalmente mejora, aunque por ahora no tenga curación.

20- Aunque me sea difícil comunicarme o no comprenda las sutilezas sociales, tengo incluso algunasventajas en comparación con los que os decís «normales». Me cuesta comunicarme, pero no sueloengañar. No comprendo las sutilezas sociales, perotampoco participo de las dobles intenciones o lossentimientos peligrosos tan frecuentes en la vida social. Mi vida puede ser satisfactoria si es simple,ordenada y tranquila. Si no se me pide constantemente y sólo aquello que más me cuesta. Ser autista esun modo de ser, aunque no sea el normal. Mi vida como autista puede ser tan feliz y satisfactoria comola tuya «normal».

La inclusión educativa y social del alumno autista en los diferentes estadios formativos requiere del docente conocimientos específicos en Neuropsicología que le permitirán cubrir las necesidades especiales del niño, desarrollar actividades enriquecedoras y trabajar en sintonía con el equipo experto.